NACAJUCA.— En Tabasco la memoria no es corta: cuando un pueblo pasa una década bebiendo agua turbia o cargando cubetas desde pozos artesanales, lo recuerda con enojo y con dolor. Y también recuerda cuando alguien regresa y resuelve.
En Guaytalpa, Nacajuca, el pozo profundo fue olvidado por diez años, enterrado en el abandono institucional. El agua buena quedó sellada bajo tierra mientras las familias se abastecían a medias, entre cortes, promesas incumplidas y burocracia. Ahora, con la orden de Javier May Rodríguez, el Gobierno del Pueblo decidió rescatar la infraestructura y devolver a más de 7 mil habitantes el derecho elemental de abrir una llave y beber agua limpia.
La noticia se dio en tierra chontal, rodeada de calles donde el polvo se mezcla con la esperanza. Y no es menor: hablamos de un municipio castigado por décadas de promesas incumplidas, que empieza a sentir que los rezagos se atacan desde abajo.
En el poblado Guaytalpa, de Nacajuca, supervisamos las instalaciones de la @CEASTabasco, donde vamos a rescatar el pozo profundo que ha estado abandonado por más de una década, pese al abasto irregular del vital líquido que ha tenido la comunidad. pic.twitter.com/UBjUdBPEfu
— JAVIER MAY (@TabascoJavier) August 21, 2025
EL POZO Y EL TIEMPO
El anuncio lo hizo May en gira por Nacajuca. Acompañado por la titular de la CEAS, Miren Eukene Vicente Ertze, el secretario de SOTOP, Daniel Casasús Ruz, y el alcalde Roberto Ocaña Leyva, el gobernador subrayó que la rehabilitación del pozo, con inversión cercana a 2 millones de pesos, garantizará 34.1 litros por segundo de agua potable.
Se trata de comunidades que conocen el abandono: San Isidro, San Simón, San José Pajonal, Tecoluta. Todas han tenido que improvisar cisternas, pozos someros, compras de agua en pipas. La reparación del pozo no es obra menor, es un acto de restitución.
MÁS OBRA PÚBLICA
El agua no vino sola. En la cabecera municipal, May inauguró junto al Ayuntamiento la rehabilitación de drenaje sanitario, pavimento hidráulico y luminarias en calles históricas como Gregorio Méndez y Benito Juárez. La inversión fue de 7.9 millones de pesos, beneficiando directamente a casi 11 mil habitantes.
El mensaje fue claro: el gobierno estatal y el municipal van de la mano. Nacajuca no es más un pueblo olvidado. Desde la construcción de un plantel del Cobatab en Pomoca hasta obras en Bosques de Saloya y Brisas del Carrizal, el territorio chontal empieza a figurar en el mapa de la inversión pública.

LA JORNADA Y LA VOZ
En Tecoluta segunda sección, la Jornada de Atención al Pueblo desplegó toda la administración estatal en territorio. No hubo escritorios de oficina ni ventanillas lentas: hubo servicios gratuitos, trámites inmediatos, médicos, apoyos y programas en la propia comunidad.
El delegado municipal, Hernán de la Cruz, resumió la emoción en una frase de bisturí: “Hemos sido un pueblo olvidado y marginado por gobiernos anteriores, pero hoy nos sentimos atendidos”.
Frente a cientos de pobladores, May pidió apoyo para liberar el derecho de vía y avanzar en un puente sobre el río Tecoluta. La escena recordaba lo que pocas veces ocurre: gobernar escuchando, gobernar desde el territorio.







PROGRAMAS Y PRESUPUESTO
No fueron sólo discursos. La Secretaría de Bienestar anunció que del 1 al 15 de septiembre abrirá registros al programa “Bienestar y Plenitud”, con pensiones de 3 mil pesos bimestrales a varones de 63 y 64 años.
En paralelo, la Secretaría de Desarrollo Agropecuario mantiene abiertos los programas “Pescando Vida” y “Crédito Ganadero a la Palabra”, que sólo en Nacajuca representan apoyos por casi 2 millones de pesos mensuales a 400 productores.
Mientras tanto, la Secretaría de Educación se declaró lista para el ciclo 2025-2026, recordando que aún hay inscripciones abiertas en todos los niveles.
En suma: más de 260 millones de pesos en infraestructura estatal y municipal en Nacajuca. Una cifra que comienza a desmontar el mito de la marginación eterna.
- Comparecencias blindadas: la rendición de cuentas con reloj y libreto a partir del lunes

- Tabasco: Oposición que no tizna

- Donde nació el cacao, florece hoy la nueva cara de Tabasco con Festival del Chocolate

EL TONO POLÍTICO
Paco Ignacio lo diría así: en Tabasco, el Gobierno del Pueblo eligió empezar por donde más duele, en los pueblos que no cuentan, en las orillas indígenas, en las calles que jamás conocieron drenaje.
El agua de Guaytalpa, las luminarias de Nacajuca, el puente pendiente en Tecoluta son piezas de una narrativa que apuesta a lo concreto: obras visibles, beneficios directos, atenciones sin intermediarios.
El pueblo lo percibe. Y esa es, en política, la línea más clara de todas.
VOCES EN NACAJUCA
- Javier May Rodríguez: “Si trabajamos con honestidad y transparencia, se pueden lograr muchas cosas”.
- Hernán de la Cruz: “Hemos sido un pueblo olvidado y marginado, pero hoy nos sentimos atendidos”.
- Roberto Ocaña Leyva: “La nueva forma de gobernar lleva atención directa y sin intermediarios”.

