La secretaria de Desarrollo Económico y Turismo, Katia Ornelas, presentó el Festival del Chocolate, con su nueva modalidad de pre festival en Comalcalco.
El aroma vuelve a casa: Tabasco prepara su Festival del Chocolate 2025
El cacao siempre ha contado historias. Ha viajado de las manos mayas al paladar europeo, de los sembradíos de Comalcalco a las vitrinas de lujo en París. En Tabasco, su cuna, el fruto vuelve a convertirse en símbolo de identidad, prosperidad y orgullo colectivo.
Con ese espíritu, el Gobierno del Pueblo presentó la 14ª edición del Festival del Chocolate, un evento que no solo busca atraer visitantes, sino redefinir la relación entre cultura, economía y territorio.
Para los tabasqueños, el festival no es un escaparate turístico más: es un espejo donde el sur se mira y se celebra a sí mismo. Es, como diría cualquier cronista cultural, un acto de memoria activa.
Y esa es justamente la clave del enfoque: convertir la herencia en futuro, la tradición en industria creativa.
El cartel oficial del Festival del Chocolate 2025 anuncia su lema: “Riqueza, magia y transformación”.
EL DULCE CORAZÓN DEL EDÉN
Del 13 al 17 de noviembre, el Parque Tabasco “Dora María” volverá a llenarse de aroma a cacao tostado, risas y música.
La secretaria de Turismo y Desarrollo Económico, Katia Ornelas Gil, detalló que este año el evento espera más de 250 mil visitantes y una derrama económica de 213 millones de pesos, con la participación de 420 expositores entre chocolateros, cacaoteros, chefs, artesanos y productores locales.
Con España como país invitado y Tlaxcala como estado hermano, el festival refuerza su vocación internacional sin perder la raíz tabasqueña. Por primera vez, habrá un Pre-Festival del Chocolate, del 7 al 9 de noviembre en Comalcalco, la tierra donde crece el cacao originario de Mesoamérica.
Allí, productores, artistas y cocineras tradicionales celebrarán el ciclo completo de la vida del cacao: siembra, fermentación, molienda y magia.
El lema de esta edición —“Riqueza, magia y transformación”— resume el espíritu del evento. Porque hablar de chocolate en Tabasco es hablar de cambio: de la semilla al aroma, del campo al futuro.
Pero en este festival se observa algo más profundo: una declaración de política cultural, donde el cacao no es solo producto, sino pretexto para repensar la economía desde lo local.
En el Foro “Sabor a Tabasco”, pequeños productores del programa Sembrando Vida, Guardianes del Cacao, Tandas para la Mujer y Selva Tabasqueña exhibirán no solo sus productos, sino sus historias. Son, en palabras de Ornelas, “la esencia de un modelo regenerativo, justo e incluyente”.
La inclusión de las Tiendas Bienestar es otra novedad con trasfondo político y social. Por primera vez, el festival será un espacio de consumo directo, donde productores de cacao, miel, café, maíz y lácteos podrán ofrecer sus productos sin intermediarios.
El símbolo perfecto de esa idea es el Chocolate Bienestar, que busca cerrar el ciclo de producción dentro del propio estado.
EL ARTE DE LA TRANSFORMACIÓN
En esta edición, el festival se atreve a cruzar la frontera entre el arte y la industria. Regresa el exitoso “Chocopasaporte”, un sistema de recompensas que premia cada compra con experiencias y degustaciones.
Pero la joya del programa será la pasarela Ximbal “Caminar con raíces”, un desfile de moda textil que convierte las telas tradicionales en manifiesto visual.
“Es un homenaje vivo a nuestra historia”, definió Ornelas. Y en efecto, la estética y el mensaje coinciden: la modernidad no está peleada con la raíz, sino que brota de ella.
Tuvimos muy buenos resultados en el Festival Cultural CEIBA 2025, que reunió a más de 18 mil asistentes durante tres días de arte, música, danza y encuentro con nuestras raíces. Ahora nos preparamos para el Festival del Chocolate, que se celebrará del 13 al 17 de noviembre. pic.twitter.com/lXt8EsYA7L
La presencia de España como país invitado abre un nuevo capítulo de reconciliación cultural. En el evento se proyectará el documental “La Ruta del Cacao: México–Granada”, que narra el recorrido del cacao desde Tabasco hasta Europa, con talleres audiovisuales en colaboración con la productora Granadeando.
También participará la Escuela Internacional de Alta Pastelería Torreblanca, una institución legendaria en el mundo de la repostería, junto con Helen Chocolate, periodista especializada que ofrecerá una cata magistral sobre los matices del cacao mexicano.
Además, habrá representación de países de la Alianza Mundo Maya —Belice, El Salvador y Guatemala— y de los Pueblos Mágicos de Teapa, Tapijulapa y Frontera, consolidando al festival como el epicentro cultural del sur-sureste mexicano.
EL CACAO UNE PUEBLOS
“El cacao vuelve a unir pueblos y generar prosperidad compartida”, dijo Ornelas. Y la frase resume bien la apuesta: el festival no solo celebra el chocolate, sino la red de vínculos sociales, culturales y económicos que lo hacen posible.
Chefs como Lupita Vidal, José Ramón Castillo, Gaby Ruiz y Edna Alanís aportarán su sello culinario en demostraciones que mezclarán técnica, memoria e innovación. También habrá espacio para concursos de fotografía, pintura infantil, mole tradicional y el certamen Promesas del Chocolate, donde jóvenes talentos presentarán sus creaciones.
Para las familias, el espacio “Origen” ofrecerá una experiencia multisensorial llamada “La Fábrica de Chocolates”, donde los niños podrán elaborar su propia barra, participar en catas y decorar galletas.
Empresas internacionales como Nestlé, Chocosolutions, Grupo Torreblanca y Chocahuatl participarán en la edición, reforzando la cadena productiva del cacao tabasqueño y mostrando que el festival ya compite con los grandes encuentros gastronómicos de América Latina.
El Festival del Chocolate llega apenas días después del exitoso cierre del Festival Cultural Ceiba 2025, que reunió a 18 mil asistentes y 467 artistas en siete foros de Villahermosa.
Mientras el Ceiba consolidó a Tabasco como potencia cultural, el Chocolate lo posiciona como potencia creativa y económica, demostrando que la cultura puede ser motor de bienestar y no solo ornamento.
La secretaria de Cultura, Aida Elba Castillo Santiago, destacó que el Ceiba concluyó con saldo blanco y un mensaje claro: la cultura es una forma de gobernar, y el cacao, su metáfora perfecta.
UNA HERENCIA QUE LATE
Desde la mirada analítica, el festival no solo promueve un producto, sino una narrativa de país: la del sur que deja de ser periferia para convertirse en modelo. Tabasco no exporta solo cacao; exporta una forma de entender la riqueza: la que nace en la tierra, se transforma en manos artesanas y se celebra en comunidad.
El Festival del Chocolate 2025 no es una feria, sino una crónica viva del desarrollo cultural y económico del sureste mexicano. Y en esa historia, el cacao no solo se come… se cuenta, se siente y se comparte.