El programa Pescando Vida en Tabasco avanza con resultados históricos. Más de 600 pescadoras y pescadores de 37 comunidades de Jonuta comenzaron a cosechar tilapia en el río Usumacinta, después de alimentarlas desde abril pasado. El éxito de esta primera producción marca el inicio de cosechas mensuales hasta junio del próximo año.
La secretaria de Desarrollo Agropecuario y Pesca, Luisa del Carmen Cámara Cabrales, destacó que el proyecto aprovecha la fuerza natural del Usumacinta, uno de los ríos más caudalosos del país. Explicó que antes se hablaba del potencial hídrico de Tabasco, pero no se había aprovechado. “Ahora trabajamos de la mano de la naturaleza, no en su contra”, afirmó.
Cosechas que fortalecen la economía local
En esta primera etapa, siete productoras de San José, Torno de Bola y Tucuyal lograron cuatro toneladas de tilapia, que serán distribuidas en mercados de Villahermosa, Macuspana y Tenosique. Con ello, el programa impulsa la economía familiar y promueve la producción sustentable.
Durante el banderazo de salida encabezado por el gobernador Javier May Rodríguez, dos unidades pesadas partieron repletas de tilapia destinada a su comercialización regional. Cámara Cabrales subrayó que esta acción reafirma la inversión histórica del “Gobierno del Pueblo” en el sector pesquero.
Inversión sin precedentes en el sector
El programa cuenta con una inversión de 619 millones de pesos, dirigida especialmente a pescadoras y pescadores de los ríos de Tabasco, una de las poblaciones más olvidadas durante décadas. La funcionaria recordó que en los últimos 35 años no se había realizado una inversión de esta magnitud en el sector agropecuario o pesquero del estado.
Un modelo único en el país
Cámara Cabrales aseguró que Pescando Vida es un programa único en México, ya que no depende de empresas privadas o transnacionales. “Es una inversión directa al pueblo, a los pescadores, y se hace de manera comunitaria”, subrayó. Este modelo busca generar autosuficiencia y aprendizaje colectivo.
Producción continua y desarrollo regional
De los 1,800 beneficiarios del programa, 600 pertenecen a Jonuta. Cada grupo de 25 productores forma una Comunidad de Aprendizaje Acuícola, con la meta de producir entre 10 y 12 toneladas de mojarra cada cinco o seis meses. Si se mantiene la planeación, cada beneficiario podría obtener ingresos de hasta 180 mil pesos por ciclo, además de su jornal mensual.
Aprovechar los ríos para el bienestar
La titular de Sedafop resaltó que por primera vez en la historia reciente, los ríos de Tabasco se aprovechan para beneficio del pueblo. “Tuvimos que esperar a que Javier May llegara como gobernador para que existiera Pescando Vida. Su experiencia con el presidente López Obrador en Sembrando Vida le dio una visión diferente”, expresó.
Finalmente, destacó que el programa rompe con los viejos modelos que usaban “tinas” artificiales para criar peces. “Hoy aprovechamos la fuerza del río, el oxígeno limpio y el flujo natural del agua. Trabajamos con la naturaleza, no contra ella”, concluyó.
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