Este 30 de septiembre, Javier May Rodríguez rendirá protesta como Gobernador Constitucional de Tabasco en una ceremonia que, más allá del protocolo, marca la continuidad de la Cuarta Transformación en su estado natal. Con el respaldo masivo que recibió en las urnas, donde obtuvo el 81% de los votos, el nuevo gobernador enfrenta el desafío de transformar ese apoyo en acciones concretas y efectivas, en una entidad que ha sido clave en la narrativa del proyecto nacional de Morena.
Con la presencia de figuras políticas cercanas a May y a Andrés Manuel López Obrador, como la secretaria de Seguridad y futura secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, y gobernadores aliados como Layda Sansores de Campeche y Salomón Jara de Oaxaca, el evento se perfila como algo más que una toma de protesta: es el comienzo de una nueva fase para Tabasco y, a su vez, un reflejo de la influencia de AMLO en el sureste del país.
LA CONTINUIDAD DE LA 4T EN TABASCO
El ascenso de May Rodríguez no es casual. Formado en las filas de la izquierda desde su paso por el PRD, y dos veces presidente municipal de Comalcalco, May ha sabido construir una carrera política al margen de los reflectores mediáticos, pero siempre cerca de los centros de poder. Su cercanía con AMLO no solo lo llevó a ocupar importantes cargos federales, como subsecretario en la Secretaría de Bienestar, sino también a ser parte de los proyectos más ambiciosos del presidente, como el Tren Maya.
Sin embargo, Tabasco no es inmune a los problemas estructurales que afectan al resto del país. Aunque la nueva administración promete continuidad, el reto de May será convertir ese discurso en resultados tangibles para una población que espera mucho más que palabras. El bienestar social, una bandera clave de Morena, será el eje sobre el cual se medirán los avances en una región históricamente castigada por la pobreza y la desigualdad.
UN ESTADO EN ESPERA DE RESULTADOS
Si bien la ceremonia en el Congreso y el discurso en la Plaza de Armas estarán llenos de simbolismo, los problemas estructurales de Tabasco no desaparecerán por sí solos. El nuevo gobernador tendrá que enfrentarse a los desafíos de gobernar un estado con altos índices de marginación, pero con un potencial económico enorme, tanto por su ubicación geográfica como por su riqueza en recursos naturales.
La jornada electoral de este año, la más grande en la historia de México, dejó un mensaje claro: la ciudadanía está atenta y demandante. A pesar de la violencia que marcó las campañas, la participación fue significativa, y ahora, los ojos estarán puestos en las nuevas administraciones. Javier May no será la excepción, y su gobierno tendrá que demostrar que la Cuarta Transformación no es solo un eslogan, sino un compromiso real con el cambio.
LLEGÓ EL DÍA
- Fecha de toma de protesta:
30 de septiembre de 2024 - Duración del mandato:
1 de octubre de 2024 al 30 de septiembre de 2030 - Principales asistentes:
– Rosa Icela Rodríguez Velázquez, Secretaria de Seguridad y futura Secretaria de Gobernación
– Layda Sansores, Gobernadora de Campeche
– Salomón Jara, Gobernador de Oaxaca
– Óscar Eduardo Ramírez Aguilar, Gobernador electo de Chiapas
– Norma Rocío Nahle García, Gobernadora electa de Veracruz
– Ariadna Montiel Reyes, Secretaria de Bienestar - Eventos artísticos en Plaza de Armas:
9:00 a.m.: Danza Infantil del Caballito (Villa Tamulté)
9:30 a.m.: Marimba infantil “Manglares de Centla”
12:00 p.m.: Tamborileros “Agalambarileros”
1:00 p.m.: Banda juvenil “Son de Aldama” - Contexto histórico:
Javier May ha sido un actor clave en la política tabasqueña y nacional, habiendo ocupado cargos en el PRD y Morena, así como funciones dentro del gobierno de AMLO.