Héctor I. Tapia
En vísperas de la votación del PEF 2026 (límite 15 de noviembre), el diputado Erubiel Alonso Qué puso en la mesa un recorte de 17.5% para Tabasco y exigió al gobernador Javier May “salir a cabildear” en Hacienda.
El punto no es menor; el problema es de método: el legislador no mostró anexos ni ramos que acrediten sus cifras y, de paso, resucitó el viejo esquema del “comité de gestión” —la política del favor— en tiempos de mesas técnicas y carpetas. Dicho sin adjetivos: sustituye gestión con discurso y plantea intermediación donde hoy hay procedimientos.
Erubiel empuja la narrativa del “recorte” antes del dictamen. Enumera tijeras en salud (–80.11%), bienestar (–89%), infraestructura (–96%) y educación (–18%), pero omite el origen: ¿qué ramo, ¿qué fondo, qué anexo?
Quien conoce el ciclo presupuestal sabe que sin folio, clave y comparativo, la alarma es eslogan. La otra mitad del cuadro está del lado estatal: interlocución con SHCP y proyectos pactados desde septiembre. El contraste nace solo.
El diputado pide un “comité de gestión de recursos” con gobernador, secretarios y un legislador que funja de intermediario. Lo llamativo no es el título, sino la nostalgia: es el molde del gestor de pasillo, no el del servidor que llega con proyecto ejecutivo, viabilidad y fuente. En 2025, esa invitación no mira adelante; mira atrás.
Quien pide “más cabildeo” sin anexos simula fiscalización para ganar cámara. Quien responde con carpetas, oficios y proyectos apuesta a la gestión. Ese es el eje de lectura.
DISCURSO VS. GESTIÓN
El acto de Erubiel trae dos claves analíticas que deben ir desde el arranque: 1) el discurso como sustituto de la gestión, y **2) el intento de reactivar el viejo modelo de intermediación (“moche político”) con su “comité”. El primero se ve en la numeralia sin soporte; el segundo, en la receta de negociar fuera de la ventanilla técnica.
El legislador instaló la alarma con porcentajes no acreditados. Si la caída es real, debe mostrar cuadros del Ramo 28/33, Anexos Transversales, clasificador por objeto de gasto y series 2024 vs. proyecto 2026. No lo hizo. El periodismo —y el Congreso— trabajan con papeles.
A la par, pidió que el gobernador “salga a tocar puertas”. El matiz: esas puertas ya están abiertas. El equipo de Javier May trabajó con Hacienda desde la entrega del paquete: prioridad a carretera Villahermosa–Escárcega, Tren Dos Bocas–Chontalpa y 60 mil viviendas. La ruta es procedimental: no comités, sí mesas técnicas.
En el juego corto, el ruido mueve titulares; en el juego largo, los anexos mueven dinero. Y Tabasco hoy compite en el juego largo.
SIMULAR FISCALIZACIÓN
A Erubiel se le conoce el pulso: verbo rápido, cámara a favor, y una biografía que explica su pauta. Balancán, 25 años de PRI, dirigente estatal, diputado local, hoy federal pluri. En el archivo local hay señalamientos de venta de candidaturas y un expediente por fraude de llanteras en Q. Roo (el auto en prenda tenía reporte).
Nada de eso hoy es materia penal, pero sí contexto: el actor que pide transparencia es el mismo que nunca la acreditó en sus pasajes más turbios.
Desde ahí, su receta encaja: simular fiscalización para recuperar foco. Un PRI sin músculo territorial necesita escena; el diputado la construye a costa de un dato no probado y un gobierno que —al menos en presupuesto— avanza por canal institucional.
La pregunta no es si debe cuestionarse; claro que sí. La pregunta es cómo se cuestiona: con papeles, no con frases. Con reservas, no con comités. Con aritmética legislativa, no con nostalgia.
La crítica que no acredita, publicita; la que acredita, modifica.
CICLO PRESUPUESTAL
Fechas y ventanillas reales donde se decide el presupuesto, no comités políticos.
- Entrega paquete: septiembre
- Dictaminación: Comisiones
- Votación: a más tardar 15 de noviembre
- Gestión: Mesas técnicas con carpetas (no “comités”)
Fuente: Calendario SHCP y Cámara de Diputados.
LO QUE SÍ ESTÁ EN JUEGO
Para Tabasco, lo real es cerrar bien el dictamen. Eso implica prioridades claras, proyectos listos y piso federal amarrado. En ese tablero, la interlocución del estado con SHCP vale más que un trending topic.
El diputado ya blanqueó su interés de competir por Centro en 2027. No es pecado; es contexto. Su elogio reciente a Yolanda Osuna y su embestida a May dibujan la ruta. Pero incluso en campaña, las cifras no pueden ser extensión del eslogan.
Lo que debe pedirse a ambas partes es sencillo: pruebas y resultados. Al diputado, anexos y reservas; al Ejecutivo, obras y convenios. Lo demás es ruido.
El cierre estará en los números del dictamen. Hasta entonces, hablar de “recorte” sin acreditación es—cuando menos—prematuro.
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