Adán Augusto López evita responder a los señalamientos de Javier May sobre posibles pactos con el crimen en Tabasco. El gobernador reafirma su compromiso de transparencia y cero impunidad en seguridad pública.

…Y Adán Augusto evita la polémica sobre presuntos pactos con el crimen en Tabasco

CDMX.— El senador Adán Augusto López Hernández ha decidido no involucrarse en la reciente controversia abierta por el gobernador de Tabasco, Javier May, quien sugirió que administraciones anteriores podrían haber tolerado o incluso pactado con el crimen organizado.

“No conozco las declaraciones del gobernador y no opino sobre asuntos que no conozco”, respondió López Hernández al salir de una reunión con la presidenta Claudia Sheinbaum en el Palacio Nacional, evitando así confrontar directamente a su sucesor en el cargo.

La decisión de Adán Augusto de mantenerse al margen contrasta con la firmeza de May, quien ha centrado su administración en un mensaje de “cero impunidad” y transparencia en el tema de seguridad.

En días recientes, May hizo un llamado a quienes ocuparon cargos de seguridad pública en el pasado para que expliquen posibles vínculos o complicidades con el crimen organizado.

Sin embargo, Adán Augusto prefirió no añadir más combustible a la controversia y, con su silencio, buscó evitar una mayor polarización dentro del partido y del gobierno tabasqueño.

UN TEMA INCÓMODO PARA EL PASADO

El silencio de López Hernández en este contexto puede interpretarse como un intento de evitar que una discusión sobre el pasado empañe la gestión actual. En el fondo, la respuesta de Adán Augusto parece un intento de proteger a Morena de un conflicto interno que podría desgastar la imagen del partido en su bastión tabasqueño.

Mientras tanto, Javier May ha aprovechado la coyuntura para reafirmar su compromiso con una administración libre de compromisos con el crimen y enfocado en restaurar la confianza de los ciudadanos.

Para May, esta coyuntura es una oportunidad de oro para diferenciar su gobierno y proyectar su visión de un Tabasco transparente y sin la sombra de la impunidad. Al enfatizar que su administración no repetirá “errores” del pasado, el gobernador ha logrado canalizar la situación en un mensaje de esperanza para la población, que ha sufrido los embates de la violencia y la corrupción.

Su postura busca restaurar la confianza en las instituciones y reforzar el compromiso de Morena con la justicia y la transparencia.

LA SOMBRA DE LA SEGURIDAD Y LOS NEXOS DEL PASADO

Las declaraciones de May no surgen de la nada. Informes de inteligencia, como los filtrados en los Guacamaya Leaks y reportes de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), han señalado a ex funcionarios de seguridad, incluido al ex secretario Hernán Bermúdez Requena, de tener vínculos con grupos delictivos en Tabasco.

¡Ya estamos en WhatsApp! Síguenos, activa la campanita y recibe al instante las noticias más importantes de El Tabasqueño.

Estos documentos sugieren que Bermúdez, quien se dirigió a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) bajo el gobierno de Adán Augusto, habría establecido alianzas con “La Barredora”, una organización criminal que presuntamente controló varias regiones del estado y cobró “derecho de piso”. ”un comerciante.

Para mayo, la situación es clara: desmantelar cualquier red de complicidad o pacto que pudiera haber debilitado la seguridad en el estado y que, hasta ahora, ha limitado el trabajo en materia de justicia.

La postura del gobernador ha sido directa y su discurso firme en torno a la transparencia y la rendición de cuentas, en un intento por restaurar la credibilidad de las instituciones.

MAY, EL PESO DE UNA HERENCIA INCÓMODA

En su gestión, Javier May ha mostrado disposición para enfrentar este reto y romper con la tradición de la discreción política que ha caracterizado la relación entre la seguridad y el crimen organizado en el estado.

A diferencia de administraciones anteriores, su gobierno se ha comprometido a informar ya garantizar que los ciudadanos conozcan la realidad de lo que ocurre en Tabasco, sin filtros ni maquillajes.

Con esta estrategia, May no solo proyecta una política de transparencia, sino que se posiciona como un gobernador dispuesto a cuestionar y transformar los esquemas del pasado.

La brecha que su administración pretende abrir entre el pasado y el presente de la seguridad pública es, en última instancia, un intento de devolver la confianza a los tabasqueños. Su objetivo no es solo el cambio de funcionarios, sino un cambio estructural en el modelo de seguridad.

Para Morena en Tabasco, esta coyuntura representa tanto un desafío como una oportunidad. Mientras May se presenta como el líder que promete enfrentar el problema desde su raíz, la respuesta de Adán Augusto subraya la complejidad de enfrentar los ecos de un pasado que aún resuena en el presente.

En ese equilibrio, May encuentra la oportunidad de liderar una administración que busque no solo la paz, sino también la reconciliación con la transparencia y la justicia en un estado que ha visto demasiado silencio y complicidad.


LA POLÉMICA EN SEGURIDAD EN TABASCO

Impacto en Morena: La falta de cohesión interna y los señalamientos cruzados representan un desafío para la imagen del partido en Tabasco.

Declaraciones de May: El gobernador de Tabasco, Javier May, señaló que las administraciones anteriores deben explicar posibles pactos con el crimen organizado.

Respuesta de Adán Augusto: El senador y ex gobernador se desentendió del tema, afirmando que no opina sobre declaraciones que no conoce.

Contexto de corrupción en seguridad: Informes de inteligencia han señalado a altos mandos de seguridad en Tabasco por presuntos nexos con grupos delictivos.