Donald Trump inicia su mandato declarando emergencia nacional y suspendiendo citas de asilo en la frontera con México.

¡Trump bloquea la frontera y suspende esperanzas: ‘no hay citas hasta nuevo aviso’!

WASHINGTON.— El escenario que muchos temían en la frontera norte de México se volvió realidad con la primera gran orden ejecutiva del recién investido Donald Trump como presidente de Estados Unidos.

Al amanecer de este lunes, agentes mexicanos en el puente internacional Paso del Norte anunciaron la suspensión de todas las citas para solicitantes de asilo que esperaban ingresar de forma legal con su folio de CBP One. Para cientos de migrantes, incluidas familias con niños, la esperanza se esfumó en un instante.

Una madre cubana, con su bebé de apenas un mes en brazos, no dejaba de llorar al ver cancelada la cita que tenía programada para la tarde. “Nos han robado la esperanza, no sé qué haremos”, lamentó entre sollozos.

Los rostros de desconcierto y desconsuelo se multiplicaron a lo largo de la fila, mientras la prensa local y organizaciones civiles intentaban comprender los alcances de la repentina medida.


¿QUÉ ÓRDENES EJECUTIVAS FIRMARÁ TRUMP?

Deportaciones masivas de “millones y millones de extranjeros criminales”.

Bloqueo total a la inmigración irregular.

Designación de carteles como organizaciones terroristas.

Restablecimiento del programa Quédate en México.

Recuperación del Canal de Panamá y renombrar el Golfo de México.


El anuncio llegó en consonancia con la retórica del nuevo mandatario estadounidense, quien ha calificado la inmigración irregular como una “invasión” que pone en riesgo la soberanía nacional.

Bajo este argumento, ordenó a su Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) suspender trámites de asilo y “bloquear de inmediato” cualquier cruce ilegal. Muchos de los afectados llevaban meses aguardando su oportunidad de presentar sus documentos de forma ordenada.

Para los migrantes, la clausura de la vía legal no solo es un golpe moral: es un mensaje de que el cierre fronterizo será total. Desde Cuba, Venezuela, Centroamérica e incluso África, miles de personas se ven atrapadas en ciudades fronterizas, sin un plan de contingencia y con recursos cada vez más limitados.

FRONTERA CERRADA: LA NUEVA ERA

A la par de frenar las citas de CBP One, Trump anunció que declarará una emergencia nacional en la frontera sur. Con ello, enviará tropas para terminar con lo que denomina “la invasión desastrosa a nuestro país” y restablecer el programa Quédate en México. Esta política, que ya se había implementado en el pasado, obliga a los solicitantes de asilo a esperar sus procesos en territorio mexicano.

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En Ciudad Juárez, Chihuahua, la suspensión de los ingresos legales por el puente Paso del Norte encendió las alarmas de las autoridades locales y de organizaciones de ayuda humanitaria. Mientras tanto, el Gobierno federal de México ha mantenido un perfil discreto, sin pronunciamientos contundentes frente a la decisión unilateral de su vecino del norte.

Trump fue claro: “Como comandante en jefe no tengo ninguna otra responsabilidad que defender a nuestro país de amenazas e invasiones, y eso es exactamente lo que haré”. Bajo este argumento, prometió designar a los cárteles de la droga como organizaciones terroristas, así como deportar “millones y millones de extranjeros criminales a los lugares de donde vinieron”. Esto, de acuerdo con su retórica, sería apenas el inicio de una nueva etapa de estricta vigilancia fronteriza.

Mientras el republicano daba su primer discurso en Washington, las escenas de caos en puntos fronterizos de Texas, Nuevo México, Arizona y California se multiplicaban. En Tijuana, además de Juárez, las oficinas donde se gestionaban las citas de asilo permanecieron cerradas, dejando a miles con la inquietud de no saber cuál será su siguiente paso.

UNA NUEVA POLÍTICA MIGRATORIA

El tono beligerante de Donald Trump no sorprende a analistas que han seguido su trayectoria. Lo que sí llama la atención es la velocidad con la que el nuevo Gobierno puso en marcha estas decisiones. Apenas horas después de asumir el poder, el mandatario dejó claro que “Estados Unidos será respetado otra vez” y que no permitirá que “nadie se aproveche” de su nación.

Entre sus primeras acciones ejecutivas, Trump también prometió recuperar el Canal de Panamá para contrarrestar la influencia china y renombrar el Golfo de México como “Golfo de América”. En su retórica, hay un marcado regreso al nacionalismo económico y a la doctrina de “América primero”. Con estas declaraciones, el republicano busca afirmarse como un líder fuerte en el tablero internacional, pero la polémica ya está servida.

Migrantes cubanos y venezolanos ven con temor la vuelta de Quédate en México, pues temen convertirse en un blanco fácil para la delincuencia organizada en zonas fronterizas. La inminente militarización de la región sur de Estados Unidos y la designación de cárteles como terroristas parecen apuntar a una fase de mayor fricción bilateral. Autoridades mexicanas, por su parte, insisten en el diálogo diplomático para atenuar el impacto de estas medidas.

EL DURO GOLPE A LOS SOLICITANTES DE ASILO

La noticia de la cancelación de citas via CBP One provocó escenas dramáticas en las inmediaciones de los cruces fronterizos. Personas que confiaban en el sistema de agendamiento para no arriesgarse a un cruce irregular quedaron a la deriva. “No somos criminales, solo buscamos nuevas opciones de vida”, clamó otra migrante cubana en Ciudad Juárez, quien llegó a la frontera tras un trayecto plagado de dificultades.

Para organizaciones de derechos humanos, la suspensión de estos trámites equivale a cerrar la última puerta de acceso humanitario. Temen que la desesperación empuje a más migrantes a buscar rutas clandestinas, incrementando el riesgo de caer en manos de traficantes o enfrentar condiciones inhumanas en el desierto. En ese sentido, la política de “cero tolerancia” que Trump ha reactivado amenaza con inflamar todavía más la crisis en la frontera.

Mientras tanto, el mandatario estadounidense sostiene que su prioridad será crear “una nación orgullosa, próspera y libre”. Según sus palabras, cualquier país que libere a sus presidiarios o pacientes mentales y permita su ingreso irregular a Estados Unidos se enfrentará a fuertes represalias.

Este endurecimiento legal y simbólico se extiende al resto de los países del continente, a quienes envía un mensaje claro: la era de la migración abierta y tolerante, según Trump, ha terminado.

En este arranque de administración, las políticas migratorias se han convertido en la punta de lanza de la agenda presidencial. El discurso apunta a que habrá mano firme contra la inmigración irregular, deportaciones masivas y una cada vez más hermética frontera. La gran incógnita es cómo reaccionarán México y el resto de América Latina ante decisiones que alteran directamente la vida de sus ciudadanos.


DATOS BAJO LA LUPA

Cancelación de Citas (CBP One)

  • Afecta a cientos de personas en Puente Paso del Norte, Ciudad Juárez.
  • También se reportan suspensiones en otros cruces de Texas y California.
  • Riesgo de saturación en albergues y creciente vulnerabilidad de migrantes.

Emergencia Nacional

  • Permite a Trump reasignar fondos para seguridad fronteriza y enviar tropas.
  • Reactiva la estrategia del “muro” y endurece la persecución a migrantes.
  • Acelera la burocracia para deportaciones “exprés”.

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