CDMX.— El Senado de la República vivió una jornada peculiar, cargada de simbolismo y tensiones políticas. Durante siete horas y sin la presencia de la oposición, el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, supervisó el proceso de insaculación para la elección de jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial de la Federación (PJF).
En un contexto donde la autonomía judicial se encuentra bajo escrutinio, la imagen de esferas con nombres sorteados en una tómbola se ha convertido en una poderosa metáfora de los retos institucionales del país.
Pese a la ausencia de las bancadas opositoras, Fernández Noroña celebró el desarrollo del proceso, asegurando que “quedó demostrado que es falso que se determine unilateralmente quiénes serán los aspirantes”.
NÚMEROS DEL PROCESO
| Concepto | Cifra |
|---|---|
| Aspirantes totales | 1,239 |
| Cargos disponibles | 881 |
| Procedimientos realizados | 68 |
Sin embargo, el evento no estuvo exento de dificultades. Diversos errores administrativos, incluyendo una confusión de género en los registros, obligaron a repetir algunas rondas del sorteo.
Con un total de mil 239 aspirantes disputando 881 cargos, el proceso de insaculación avanzó con retrasos y ajustes constantes. Entre los candidatos figuran nombres relevantes, como Paula María García Sánchez Cordero, hija de la exministra Olga Sánchez Cordero, y el magistrado decano Enrique Figueroa Ávila. La diversidad de perfiles refleja tanto la complejidad como los intereses en juego en el aparato judicial.
ERRORES Y CORRECCIONES EN LA MECÁNICA DEL PROCESO
Un incidente destacado ocurrió cuando el número 10, correspondiente a una aspirante mujer, fue erróneamente asignado a un participante masculino. Fernández Noroña, con su característico tono firme, ordenó detener el proceso para corregir la situación. “Retírense las esferas y vuélvase a poner como debe ser”, instruyó el legislador.
Los organizadores también tomaron precauciones para evitar que las esferas rodaran por el suelo, como ocurrió el año anterior. Esta vez, los contenedores y rieles fueron acondicionados con pegamento, un detalle logístico que no pasó desapercibido entre los presentes.
LOS NOMBRES QUE ESTARÁN EN LA BOLETA
Entre las mujeres insaculadas para competir por un puesto en la Suprema Corte, destacan figuras como Ana María Ibarra Olguín, Dora Alicia Martínez Balero y Magda Zulema Mosri Gutiérrez. En el caso de los hombres, fueron sorteados nombres como Edgar Cosco Sosa, Guillermo Pablo López Andrade y Sergio Javier Molina Martínez.
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Para la Sala Superior del Tribunal Electoral, algunos de los aspirantes incluyen a Diana Margarita Favela Herrera, exconsejera electoral del INE, y Armando Hernández Cruz, expresidente del Tribunal Electoral del Distrito Federal.
LA AUSENCIA DE LA OPOSICIÓN: UNA SEÑAL POLÍTICA
El proceso estuvo marcado por la notoria ausencia de las principales fuerzas de oposición. Su retiro de la sesión fue interpretado como un acto de protesta ante lo que consideran una falta de transparencia y un intento del oficialismo por controlar el Poder Judicial. Esta desconfianza refleja una grieta creciente entre el Legislativo y los sectores críticos del aparato judicial.
A pesar de estas tensiones, Fernández Noroña se mostró confiado en que la revisión de las listas avanzará sin contratiempos. “Lo que sigue es revisar la lista para que no lleve ningún error”, afirmó.
CLAVES DEL PROCESO DE INSACULACIÓN
- Inicio con retraso: La sesión comenzó una hora y media tarde debido a la entrega tardía de listas por parte del Tribunal Electoral.
- Errores administrativos: Varios sorteos fueron repetidos por confusiones en el registro de género.
- Ajustes logísticos: Los organizadores colocaron pegamento en los contenedores para evitar accidentes con las esferas.
MÁS ALLÁ DE LA TÓMBOLA
La imagen de una tómbola girando en el Senado encapsula tanto la complejidad como las debilidades del sistema judicial mexicano. La insaculación, concebida como un mecanismo de imparcialidad, enfrenta críticas que ponen en duda su eficacia.
En un contexto político polarizado, la selección de jueces y magistrados se convierte en un campo de batalla donde se cruzan intereses partidistas y reclamos de independencia judicial.
El camino hacia una verdadera renovación institucional sigue siendo accidentado. Por ahora, las esferas han dictado el siguiente paso en este proceso, pero la legitimidad de quienes asuman estos cargos estará siempre bajo el escrutinio público.
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