A seis meses de haber asumido la gubernatura, Javier May Rodríguez llega a su Primer Informe al Pueblo 2025 con un promedio de 56% de aprobación ciudadana, según el cruce de siete encuestas nacionales aplicadas entre enero y marzo.
Lejos del aplauso fácil, pero también del rechazo, la cifra dibuja un escenario de legitimidad funcional: un gobierno que no ha necesitado polarizar para sostenerse ni recurrir a la estridencia para legitimarse.
Entre las encuestas analizadas destacan firmas como Rumbrum, Mitofsky, Demoscopia Digital, Factometría, CE Research, Arias Consultores y SRC. Algunas lo colocan por encima del 60%, otras apenas lo rebasan por encima del 42%, pero el promedio se mantiene estable.
En enero, el dato combinado fue de 55%; en febrero, subió a 54.7%, y en marzo, alcanzó un 58.6%. No es un pico artificial de popularidad, sino un reflejo de ritmo propio: uno que combina presencia territorial con ejecución de programas y contención en seguridad.
En el contexto regional, la cifra adquiere otro valor. Mientras gobernadores del sur y sureste han oscilado entre arranques mediáticos y caídas abruptas, May ha mantenido una curva estable, sin desplomes ni alzas infladas. No arrasa, pero avanza. Y en política, la estabilidad también es capital.
DE LA CRISIS AL CONTROL: ENERO VIOLENTO, ABRIL EN CALMA
El primer gran reto del nuevo gobierno no tardó en llegar. Durante los primeros quince días de enero, Tabasco vivió un repunte de violencia: homicidios múltiples, cuerpos abandonados en la vía pública y un clima de tensión en municipios clave como Centro, Cunduacán y Huimanguillo. La reacción fue inmediata.
El gobierno estatal, con apoyo de la Guardia Nacional y el Ejército, activó una estrategia dual: reforzar la presencia policial y desplegar brigadas sociales en zonas de alta incidencia. De enero a marzo, se registraron 150 detenciones por delitos de alto impacto y se aseguraron 50 armas de fuego, según datos oficiales.
Al cierre de marzo, los homicidios dolosos habían disminuido notablemente, y la percepción de seguridad mejoró, sobre todo en Villahermosa. El gobierno no pactó ni postergó. Actuó con método. Para una administración recién llegada, contener un brote así es una señal de oficio político.
GOBIERNO EN MOVIMIENTO: 36 JORNADAS, 2,700 KM
Entre el 7 de enero y el 31 de marzo, Javier May encabezó 36 Jornadas de Atención al Pueblo en los 17 municipios de Tabasco, redefiniendo la relación entre Estado y ciudadanía. Las jornadas —martes, jueves y sábado— se llevaron a cabo en plazas, canchas y escuelas.
Participaron al menos 12 dependencias estatales ofreciendo servicios como actas de nacimiento, atención médica, asesoría jurídica, inscripción a programas sociales y legalización de tierras.
El gobierno recorrió más de 2,700 kilómetros en tres meses, atendiendo miles de personas sin necesidad de traslados a oficinas centrales. Cada jornada se convirtió en ventanilla móvil, diagnóstico en tiempo real y ejercicio de presencia institucional.
En un estado con rezagos estructurales, que el gobierno llegue antes que la queja es una forma de gobernabilidad territorial.
LOS PROGRAMAS YA BAJARON: 100 MIL PERSONAS BENEFICIADAS
Lejos del anuncio, cerca del resultado: más de 100,000 personas han recibido beneficios directos de programas sociales entre enero y marzo. La Pensión Estatal para hombres de 60 y 64 años comenzó su dispersión el 20 de enero, con 18,700 beneficiarios que ahora reciben 3,000 pesos bimestrales.
Además, 10,000 mujeres accedieron a Tandas del Bienestar con créditos iniciales de 5,000 pesos sin intereses para emprendimientos básicos. Se entregaron también 3,200 certificados de vivienda escriturados, en su mayoría, a jefas de familia.
En el sector rural, programas como Crédito Ganadero a la Palabra, Sembrando Vida Tabasco y Pescando Vida incorporaron a más de 5,000 beneficiarios iniciales, entre campesinos y pescadores. La ejecución es silenciosa, pero masiva. Y la política social, lejos del discurso, se empezó a palpar en el bolsillo.
OBRAS DE PESO Y RESPALDO PRESIDENCIAL
La visita de Claudia Sheinbaum a mediados de marzo vino con obras, respaldo y discurso. En Huimanguillo, lanzó el Programa de Vivienda para el Bienestar, con más de 5,000 casas proyectadas para este año. En Macuspana, arrancó la ampliación de la autopista Macuspana–Escárcega, con una inversión inicial de 1,500 millones de pesos. En Villahermosa, puso en marcha la planta potabilizadora Carrizal II y el acueducto Usumacinta.
“¿Es buen gobernador Javier? ¡Sí! ¡Gran gobernador del estado de Tabasco, Javier May!”, dijo la presidenta.
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Las obras no son promesas ni proyectos en PowerPoint: ya comenzaron. Y más allá del elogio, el mensaje fue político y operativo: Tabasco es un nodo prioritario de la Cuarta Transformación.
UN ESTILO QUE NO CONFRONTA, PERO AVANZA
Javier May no confronta, no dramatiza, no personaliza. Su estilo de gobierno se basa en ejecutar, escuchar y recorrer. Sus frases más repetidas no son consignas ideológicas, sino sentencias prácticas:
Gobernar es caminar.”
“Cada peso ahorrado se invierte en el pueblo.”
“No venimos a ver pasar el tiempo.”
Su discurso no busca aplauso, sino coherencia. Esa austeridad verbal y política lo ha mantenido alejado de los excesos comunicacionales y, quizá por eso mismo, cerca de una aprobación moderada pero sostenida. En tiempos de polarización fácil, gobernar sin gritar también es gobernar.
El 56% de aprobación promedio en siete encuestas no es un boleto asegurado para la gloria, pero tampoco una señal de desgaste. Es, en todo caso, una fotografía de equilibrio: un gobierno que inició con retos, contuvo la violencia, activó programas, recorrió el territorio y ya ejecuta obras de fondo.
Ese número —ni bajo ni espectacular— es coherente con la forma de gobernar de Javier May: una administración que no busca reflectores, pero tampoco los esquiva cuando hay resultados. Si las cifras suben o bajan dependerá no de discursos, sino de constancia.
Por ahora, el dato está ahí. Y en Tabasco, al menos por estos seis meses, los números no mienten. Caminan.
1. ¿Cómo se calcula?
Se suman los porcentajes y se divide entre el número total de encuestas.
2. Enero (7 encuestas)
- SRC: 56.5%
- Rumbrum: 65.2%
- CEResearch: 48.0%
- Factometría: 58.1%
- Demoscopia Digital: 54.3%
- Arias Consultores: 59.1%
- Mitofsky: 43.9%
Promedio enero ≈ 55.0%
3. Febrero (7 encuestas)
- SRC: 60.3%
- Rumbrum: 71.5%
- CEResearch: 41.0%
- Factometría: 55.1%
- Demoscopia Digital: 50.1%
- Arias Consultores: 62.6%
- Mitofsky: 42.4%
Promedio febrero ≈ 54.7%
4. Marzo (5 encuestas)
- SRC: 63.5%
- Rumbrum: 63.8%
- CEResearch: 59.0%
- Factometría: 57.4%
- Demoscopia Digital: 49.5%
Promedio marzo ≈ 58.6%
5. Promedio General
Total: (55.0 + 54.7 + 58.6) ÷ 3
Promedio trimestral ≈ 56%
19 encuestas consideradas.
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